[vc_row row_type=”row” use_row_as_full_screen_section=”no” type=”full_width” text_align=”left” box_shadow_on_row=”no”][vc_column][vc_column_text]El Puente del Pilar fue nuestro último surf trip en el que volvimos al País Vasco en busca de olas de calidad para aprender y mejorar nuestro surfing, Hendaya fue el lugar elegido por su enorme playa y la posibilidad de encontrar olas de diferente tamaño y dificultad.

Otoño es probablemente una de las mejores épocas del año para viajar al norte pues fácilmente encontramos olas buenas y con frecuencia el tiempo y las temperaturas son agradables; este año gozamos de 3 días de sol y calor, el verano parece que se resiste a abandonar el Cantábrico. En cuanto a olas no nos podemos quejar, Hendaya es una playa que cuando mejor funciona es con marea más bien alta y por las mañanas nos cuadraba la marea bajando, así que las olas no eran muy grandes, pero si con bastante buena forma y fuerza suficiente para empujarnos y poder surfear, por las tardes nos pillaba con marea llena y las olas crecían lo suficiente como para tener sesiones más adrenalínicas y poner en práctica lo aprendido en las clases matutinas.

En este viaje nos juntamos un grupo, como siempre reducido de 9 personas, algunos surfers y otros SUPpers, algunos con más experiencia que otros, pero todos encontraron su lugar para poder practicar y progresar gracias las consejos personalizados que nuestro entrenador Miquel Roigé fue dando. Las escapadas de tres días la Cantábrico son un lujo para los que vivimos en el Mediterráneo y no gozamos de una frecuencia ni consistencia de olas, en pocas horas viajamos con nuestra súper cómoda furgoneta y una vez allí encontramos el mejor spot gracias a nuestra experiencia de casi quince años surfeando y viajando por toda la costa atlántica de la Península, desde Hendaya (País Vasco francés) hasta el Algarve (Portugal). En tres días podemos hacer trabajo intensivo que favorece el aprendizaje porqué lo que el surfing requieres es mucha práctica, feedback, corrección y practicar de nuevo, así que con 4 horas al día de tabla acabamos el Puente con una buena progresión.

En este viaje tuvimos la suerte de vivir un momento mágico dentro del agua y que dan sentido a este deporte y lo hacen tan maravilloso. El primer día tuvimos una espectacular puesta de sol que llenó el cielo de colores dorados y rosados, una luz espectacular que se reflejaba en las olas al romper y daba forma a las miles de gotas de agua que formaban el velo de la ola al salir despedidas de ella por el viento de offshore. Acompañados por una buena compañía, risas y olas largas hicieron que fuera pues eso, simplemente maravilloso, porqué como solemos decir, las mejores sesiones no tienen por qué ser aquellas con las mejores olas, sino que es un conjunto de cosas y situaciones que hacen que de una sesión tengamos mejor o peor recuerdo, por ejemplo el lugar, el paisaje, la luz, quien te rodea, el feeling con el mar, etc. Son las pequeñas cosas que complementan la sesión.

Si tu también quieres vivir experiencias maravillosas como esta, no te pierdas el próximo surf trip, será en diciembre a Marruecos con un viaje de lujo todo incluido, abierto tanto a SUPpers como a surfers de todos los niveles, te prometemos que nunca olvidarás esta experiencia.

¡Aloha![/vc_column_text][vc_empty_space image_repeat=”no-repeat”][vc_video link=”https://vimeo.com/296671101″][vc_empty_space image_repeat=”no-repeat”][/vc_column][/vc_row]